A principios del siglo XX, en el año 1912, nació el Hospital Español Rosario de Santa Fe en la ciudad de Rosario. Todo comenzó con la generosa donación de terrenos por parte del abogado español Don Rafael Calzada, un asturiano de nacimiento, y su esposa Celina González Peña. Con un profundo deseo de proteger los derechos de sus compatriotas y de los habitantes de la ciudad que los habían acogido con cariño, decidieron fundar este centro médico.
En ese predio, se colocó la piedra fundamental del Policlínico donada por los hermanos Ramón y Ángel García, quienes también ofrecieron una impresionante fuente de cerámica que adorna el patio principal del hospital. Esta monumental fuente está magníficamente revestida con hermosos azulejos de cerámica de Ruiz de Luna en Talavera de la Reina, Toledo, España.
Hoy en día, el Hospital Español Rosario de Santa Fe es en parte un servicio de medicina prepagada de la Asociación Médica de Rosario (AMR), y cuenta con una amplia gama de servicios médicos y especialidades. La historia de esta institución está estrechamente vinculada a la generosidad y solidaridad de aquellos que, como los hermanos García y Don Rafael Calzada, contribuyeron a su creación y desarrollo. La belleza de los azulejos de Ruiz de Luna, presente en la fuente, añade un toque de arte y distinción a este centro de atención médica en la ciudad de Rosario.
En 1927, se creó esta majestuosa fuente de cerámica, con unas impresionantes dimensiones de 6 metros de diámetro y 4 metros de altura, la fuente se encuentra en un estado de conservación perfecto, a diferencia de la fuente en el Parque de la Independencia. Con un diseño de estilo renacentista, presenta un solo piso con un pilón mixtilíneo y un pedestal central a dos alturas, adornado con cuatro pilastras y leones-surtidores. En cada cara de la parte más elevada, se encuentran máscaras de faunos viejos que arrojan agua al pilón. La taza, ubicada en la cima del pedestal, cuenta con un pie y surtidor.
El precio acordado para esta magnífica fuente, ubicada en la C/ Sarmiento núm 3.150, sede del Hospital, fue de 15.000 pesetas, tras una rebaja solicitada por los clientes de 700 pesetas. En muestra de gratitud hacia los directivos de la colectividad que encargaron esta gran obra, Ruiz de Luna obsequió al centro dos ánforas.
Aunque el acuerdo se cerró medio año después que otro proyecto de fuente, ambas fueron empaquetadas y enviadas juntas para ahorrar costos aduaneros, atendiendo al ruego del Directorio de la Sociedad de Beneficencia de la clínica filial de la colectividad española que donó la fuente. Un total de 147 cajas con un peso de 3.868 kilogramos y un volumen de 15 metros cúbicos fueron transportadas con indicaciones para su montaje, marcadas con tinta roja para diferenciarlas de otras cajas señaladas en negro.
El vapor «Alsina» transportó las dos fuentes hasta el puerto de Buenos Aires, y meses después, el 2 de mayo de 1929, tuvo lugar la inauguración en un emotivo acto que contó con la asistencia del Embajador de España, D. Ramiro de Maeztu.
Un comentario
Muy interesante artículo sobre la fuente de cerámica del Hospital Español de Rosario. Desde el programa «Entre el orbayu y la garúa» (Radio Gran Rosario) estaríamos interesados en contactar con el autor. Enhorabuena por la publicación que hemos compartido desde nuestras páginas en redes.